lunes, 18 de enero de 2010

MÚSICA, VERDAD Y VIDA


La música de Modest Mussorgsky, más allá de su sonoridad, trata de dibujar de forma específica, alguna idea o imagen en el que la escucha. En ello, este compositor ruso es ejemplar, un maestro en lo que damos en llamar música programática o descriptiva.
Desde muy antiguo, Rusia es poseedora de una cultura popular musical muy abundante. De esa fuente bebió Mussorsgky y, al pasar por su alma extremadamente sensible estas tradiciones que tanto amaba, su música quedó impregnada de su amor por el pueblo y, en especial, por los inocentes, los pobres y los desamparados, mostrándonos la imagen fiel de la vida, la verdad, a través de la belleza de sus composiciones.
El fallecimiento repentino a temprana edad de su íntimo amigo, el arquitecto Viktor Alexandrovich Hartmann, por el que sentía un profundo afecto, lo llevó a cooperar en una exposición retrospectiva de los trabajos de éste y de cuya experiencia nace la "Suite Hartmann", en la que Mussorsgky describe diez de los cuadros y diseños presentados en la muestra.
Esta obra, conocida hoy sobre todo por la extraordinaria orquestación que Maurice Ravel hizo de la partitura de piano original como "Cuadros de una Exposición", define de forma clara la personalidad de Mussorsgky, indiscutible ejemplo de lo que conocemos como estilo ruso.
Antonio Grela